En 1989, el muro de Berlín se convirtió en algo
irrelevante, luego del permiso que Hungría concedió a los alemanes del este de
dejarlos pasar por su país, para atravesar Austria y así llegar a la RFA. En
Noviembre del mismo año cuando las noticias decían que no habría más
restricciones para viajar o trasladarse de un lugar a otro, los ciudadanos
comenzaron a demoler el muro sin ningún tipo de interferencia por parte de
oficiales del gobierno. El Este alemán participó también en la destrucción del
muro y se reunió junto al Oeste en 1990 como una Nación, LA REPÚBLICA FEDERAL
ALEMANA.. 3“La caída del Muro de Berlín fue el
resultado de una imparable revolución popular que se anidó durante más de
cuarenta años, y que conoció sucesivos estallidos debido a la inviabilidad del
régimen estalinista de la Alemania oriental, y de los regímenes estalinistas en
general, principalmente el ruso”. Se inscribió en la ola de levantamientos que
inició la clase obrera polaca en 1980, una ola que puso al desnudo la negativa
de la clase obrera a soportar la carga de la 'coexistencia pacífica' y de la
'distensión' entre el imperialismo mundial y la burocracia estalinista, que se
traducía en pesadas deudas externas y descomunales 'ajustes' económicos. Por
eso, aunque las grandes potencias de los dos bloques ya habían tomado la
decisión de enfrentar a los pueblos del este, no mediante la represión sino
mediante el 'desvío democrático', el derribamiento del Muro por una revolución
popular fue un episodio de la revolución europea, que quebró el artificio
montado (por el imperialismo mundial y la burocracia soviética) para dividir al
proletariado más fuerte de Europa. 4“La ruina de los regímenes comunistas de Europa centro oriental tuvo
sin duda causas externas de índole económica, social y político. Pero
internamente tuvo más bien otras dimensiones, sobre todo éticas y
antropológicas y, en último término, espirituales”. Una inteligentísima derecha que niega la división entre
izquierdas y derechas, ejerce hegemonía al discurso cultural mientras copa la
parte sustancial de la red mediática global y deja la iniciativa programadora
en manos de los centros de diseño económico, propiciando un economismo
determinista ciego ante el coste social y ecológico del crecimiento. Si bien el
mercado aparece como el Gran Legitimador de lo bueno y lo malo y por lo tanto
de lo necesario, el discurso se uniforma y se centraliza mediante la progresiva
inculcación de pautas culturales regresivas en consonancia con el totalitarismo
del pensamiento único neoliberal. 5“En ocasiones se produce la aparente contradicción de que esa reforma
neoliberal basada en la libertad de iniciativa frente al gregarismo estatal
debe apoyarse en un neoautoritarismo militarizado para cumplir sus objetivos de
hegemonía”.Los neoliberales
tienen en Monte Peregrino su montaña sagrada, de la que descendió Hayeck en 1948
con las tablas de la ley antimarxistas y antikeynesianas, pero la derecha
neoliberal autoritaria se ha apoderado del mensaje y lo ha convertido en los
mandamientos canónicos de su proyecto histórico. El control economista de la
política ha dejado casi sin función a los políticos y tiende a convertir los
Parlamentos nacional-estatales en simples teatros donde se desarrolla la
dramaturgia de una democracia para profesionales.